En el refugio de las moscas.

Donde ninguna tranquilidad habita Viajan los sueños rotos Agazapados en las miradas vacías De quienes en éxodo clandestino Se aferran al óxido de un vagón De un tren que no va hacia ningún lugar En el refugio de las moscas Lloran los silencios que emigran Las soledades que emprenden travesías En masivas cofradías de un mismo dolor Que no entiende de idiomas ni de color ¿Quién los ve? ¿Quién las escucha? ¿Quién los entiende? ¿Quién las ayuda? ¿Quién los percibe? ¿Quién las respira? Caminan sobre las llagas de los desiertos Imaginado oasis de oportunidades Se ahogan en el agua salada…

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Lluvia.

Llueve y tú danzas alegre, aquí en mi alma La nieve se ha transformado en pequeños riachuelos de agua fría Y tú danzas alegre, aquí en mi alma Acaricia las desnudas ramas de los lozanos arces y recorre las plomizas calles vueltas veredas y tú, danzas alegre, aquí en mi alma Copiosa la lluvia hace al cielo bajar a los linderos y divagar pensativo entre el embrujo y encanto de esta tarde que es festejo y felicidad, y tú danzas alegre, aquí en mi alma Invierno de enero con sus pobladas nieves que algodonan las cornisas en la ciudad, el…

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Viernes.

Y yo te pienso con mis manos Con mis ojos que celosos guardan tu imagen intacta Es viernes, y yo: te evoco como en la sosiega tarde del domingo Cuando la nieve de enero me habla de vos Perfectamente sabe que su niebla es tu encanto Te busco en la banca solitaria donde siempre estás, Arrebatadoramente hermosa: prodigioso es tu hechizo Musitás el eco de las ancestrales montañas de mis abuelas Y dibujás en el umbral de mis ojos de cipota aldeana Los empolvados caminos por donde anduvieron los pies descalzos de mis abuelos Es viernes, y yo: te escucho…

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La culateada.

¡Por mi culpa, por mi culpa, por mi gran imbécil culpa! Así dígase usted ahora frente al espejo si es que algo de decencia le queda para verse la loza frente al volado, usted y sólo usted es culpable de haber elegido con su voto a un genocida que aparte de asesino y violador de mujeres y niñas, le sacó filo al colmillo con la misma piedra con la que le quebró la cabeza a crías en los tiempos en que era conocido como Tito, y entre trance y trance ahora que está en la poltrona ha transgredido la tierra…

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Remitente: remesa.

He notado que en los periódicos de mi país de origen se habla muy poco de las personas migrantes, en los medios de comunicación televisivos y radiofónicos sucede lo mismo. Son los invisibles que salen del país en parvadas todos los días a todas horas. Lo mismo sucede en otros países, Guatemala no es la excepción. De vez en cuando cubren con una fotografía y una nota de diez líneas, las estadísticas de las deportaciones, pero ni cuando muere gente en La Bestia son capaces de dedicar un espacio. Siendo las personas migrantes las que sostienen las bases de sus…

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Ojos de espejo azul.

Ha salido el sol en La ciudad de los Vientos, después de tres días de gélidas y mortales temperaturas el clima empieza a ser benevolente con nosotros. Se ha conmovido quizás por tanto rostro triste y empañado como vidrio sin limpiar, ojos de miradas muertas y lágrimas que prefieren quedarse en el umbral, para guardar tibias el calor de las tristezas contenidas. La soledad se ha instalado en las puertas de los edificios en donde vive el proletariado de esta enorme urbe. El desempleo se ríe a carcajadas, como diciendo: el infortunio del fallido sueño, como repitiendo: vaya emblema. Como…

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