Fresca brisa de mar.

Fresca brisa de mar. Con esta forma de amar tan necia y bipolar con esta letra insensata que día a día se delata sin analizar. Con esta forma de amar que te busca insistente paranoica e impaciente buscando tu diafanidad. Que no repara en disparates de moralidad que me llena de poesía que duerme entres mis poros y juega a hacerme fantasear. Dime tú mujer genuina farol en la avenida luz en mi soledad qué veniste a buscar. ¿Una flor en el baldío? ¿Una golondrina herida? ¿Un silencio abismal? ¿Acaso mi trastorno? Tú, que eres infinidad. ¿Qué haces en mi…

Continuar leyendo…

Reliquias de arbitraje.

Durante muchos años no toqué ese álbum de fotografías. Lo metí dentro de una bolsa negra y lo guardé en un rincón de la librera en mi cuarto. Dentro estaba el vestigio de mi sueño fracasado. Limpiaba la librera, movía los libros de lugar y el álbum dentro de la bolsa negra seguía ahí, el solo hecho de pensar en abrirlo me ponía de mal humor. Dentro estaban las fotografías de mi paso por el arbitraje guatemalteco y algunos recortes de periódico de las pocas entrevistas que di. En un sobre aparte guardé los recortes de periódico de las entrevistas…

Continuar leyendo…

Quédate.

Quédate, quédate en mí Quédate en los instantes No te marches frenesí No te diluyas, no te evapores Quedáte suave brisa de abril.   Quédate en mi soledad Alójate en mis silencios En mis ganas de soñar Quédate en mis deseos En mis anhelos de abrazar.   Quedáte en la niebla crepuscular Quedáte en canto del riachuelo En la mañana de arrabal Quedáte en mis ilusiones En mi alegría de amarte, inmensidad.     Ilka Oliva Corado. Marzo 18 de 2015. Estados Unidos.

Continuar leyendo…

México: el gigante dormido que no despertó.

De pronto pensamos que la desaparición de los estudiantes de Ayotzinapa iba a romper el dique y que el pueblo tomaría las calles para hacer escuchar su voz y que aquel gigante dormido despertaría. Era la hora, era el hasta aquí, era el ya no más. Porque, ¿qué más puede soportar un pueblo cuando ya le han desaparecido y asesinado a sus hijas (los feminicidios que ya no son en la Juárez lejana y estigmatizada por fronteriza) cuando le han vendido la tierra, cuando le han privatizado hasta el deseo de respirar. ¿Qué más puede soportar un pueblo cuando los…

Continuar leyendo…

Florecita de albedrío.

I. Florecita de albedrío Sombra de corredor Si yo pudiera escribiría Un poema para vos   Unos versos que te digan Brisa de inspiración Con unas cuantas rimas Lo que no puedo con mi voz. II. Primavera, primavera No la traigás en una flor Traéla en la llovizna Que siempre es de redención.   Traéla en el trino De las aves que festejan La partida del invierno Y del frío que se aleja. III. Hojita de tomate tierno Pétalo de flor de fuego Para vos todos mis versos Para vos es mi sosiego. Ilka Oliva Corado. Marzo 14 de 2015.…

Continuar leyendo…

Un pueblo mezquino.

Qué es de un pueblo que perece En su silencio abismal Qué es de un pueblo que por miedo Siempre callará Qué es de un pueblo aletargado Que  teme avanzar Qué es de un pueblo que cobarde No quiere despertar.   Qué es de un pueblo que se hunde Con la bendición del Santo Oficio Qué es de un pueblo que comulga Con las religiones y sus vicios.   Qué es de un pueblo sin memoria Sin conciencia y sin dignidad Qué es de un pueblo que no honra La sangre seca y la que nacerá.   Qué es de…

Continuar leyendo…

El Venancio de la Macaria Batista.

Los de Escuinapa cuentan que fue un mal de ojo, los de San Miguel dicen que de seguro le dieron alguna toma, los de Caparrosa piensan que fue cosa de un mal espíritu por el pecado capital que cometieron los papás. La noticia la regó el Betío de la Mila Quezada, todo sucedió la última noche de la feria patronal. El Venancio, hijo de la Macaria Batista y del párroco de la iglesia que tuvo que colgar los hábitos cuando se enamoró de la hija de don Clemente y nía Patronila, del Pinito cuando ella apenas comenzaba a botar la…

Continuar leyendo…