…Y así me enamoré de la Violeta Parra.

A la Violeta me la presentó otro de mis grandes amores, la Mercedes Sosa, a La Negra la conocí por casualidad. Quisiera decir con cierta presunción y por romanticismo que a la gran Mercedes la conocí en mis tiempos de universitaria, o que fueron los Guaraguao los que en alguna declaratoria de Huelga de Dolores en la Universidad de mis amores me presentaron a la Violeta Parra con “Me gustan los estudiantes.” Pero fue en soledad y en el extranjero de recién emigrada “navengando” en Internet con una ordenadora de escritorio que me salió tres veces más cara del precio…

Continuar leyendo…

Contemplarte.

No sé por qué te escribo Por qué me asilo en los versos que buscan desnudarte Recorrer tu cuerpo y apaciguarse en tu pudor En la fragancia de tu ser sosiego Amor, en tu esplendor.   Tal vez porque no sé cómo tocarte Cómo acariciar tu delicadeza de Venus Cómo acercarme y cortejarte Cómo contemplarte sin lastimarte Eres inalcanzable lo tengo que advertir Que aunque logre imaginarte en todas partes Estás tan lejos de mi.   No sé por qué te escribo a todas horas Que no acepto demora cuando te tengo que decir: Que eres primavera, inocencia y abrigo…

Continuar leyendo…

No debo

No debo. No debo quererte, ¿sabés? No debo amarte así  No debo inventarte, Dulce miel de cerezo. No debo acariciarte, Niebla de otoño. —– No debo admirarte, Rocío de la alborada.  Debo correr,  Sí, correr escapando de ti. —- No debí respirarte, Pétalo de geranio.  Acercarme a tu belleza de cordillera  Te fatigo con mi ansiedad febril Con mis lunas, con mi caos, Con mi impertinencia inaplazable. Te fastidio con mis laberintos bipolares,  Con mis sinsabores, con mis avatares.  —– Y tú siempre paciente  Agua del riachuelo  Lindeza del ocaso Abres tus brazos  Para mis trastornos abrigar  No lo comprendo,…

Continuar leyendo…

No regresarán

No regresarán .Las sonrisas de los niños que migraron Los sueños de los que murieron de frío No regresará la inocencia arrebata. —- Las ilusiones robadas  Las tiernas manos que picaron piedra  Las rondas que no pudieron jugar. —- No regresarán los segundos, Los instantes  Los que murieron de hambre  Los que perecieron en el desierto No regresarán nuestros niños muertos. —- No volverá a ningún campo florecido La dulce miel de los niños explotados  Que están en el jornal. No volverá a iluminar la cándida sonrisa de las niñas abusadas Tristes, marchitas, mancilladas.  No volverá a ser parvada la…

Continuar leyendo…

Celebración. 

¿Qué celebramos hoy? ¿La hipocresía? ¿La labia? ¿El embuste? ¿El abuso? ——- ¿Qué celebramos con tanta alegría, nosotros cretinos? ¿La desigualdad social? ¿La explotación infantil? ¿El escarnio? ¿La injusticia? ¿Nuestra inconsciencia? —— ¿Celebramos jubilosos la mancilla de nuestras crías? Ajá, ¡brindemos entonces, nosotros cretinos! ¡Salú! Ilka Oliva Corado. Octubre 01 de 2015 Estados Unidos.

Continuar leyendo…

Las maras en Centroamérica.

Texto publicado originalmente en Revista LatiCe, Suecia. Buscar información acerca de las maras, pandillas o delincuencia juvenil puede ser un arma de dos filos, en la mayoría de textos tratan el tema con una postura clasista que discrimina por su condición social a las mocedades de arrabal, precisamente muy poco de objetividad en estos estudios que buscan sancionar con apelativos como “clicas criminales.” Pero realmente dónde, cómo y porqué se origina este fenómeno en Centroamérica. No hay que olvidar la violencia institucionalizada, la crueldad con la que actuaron los gobiernos en el Conflicto Armado Interno que atacó países como El…

Continuar leyendo…

Cuando sólo se tiene la palabra para denunciar.

Me sucede todo el tiempo, que cuando asisto a eventos sociales o fiestas donde hay personas que han leído mis artículos, me señalan de mentirosa, muchas de ellas indocumentadas también, me dicen que lo que digo es falso, que esas cosas que cuento no suceden con los indocumentados, que este país es generoso y que ellos nunca han sufrido discriminación. Pero después de dos cervezas comienzan a sacar lo que realmente viven y sienten y los veo llorar y los escucho pedirme disculpas, y contarme con detalle lo miserable de sus existencias en la exclusión de una sociedad hipócrita y…

Continuar leyendo…