Ya no callaré.
El tercero de la trilogía, qué ahogo de dolor. Ya no callaré. Ni un día más callaré No guardaré en mi espinado corazón Las sobras de tu deshonra No te permitiré ni un segundo más Que extingas desde tus sombras La tenue luz de mi alma Te prohibido intentar abolir La voz de mi escrúpulo Que clama por justicia ¡Ya no callaré, mezquino, profanador! He venido desde mi digno suelo Con mi corte y mi huipil No los raídos que dejaste junto a mi cuerpo despojado de pureza Ya no soy la indefensa niña que despedazaste por dentro Y que…