Madres de migrantes desaparecidos.

Recuerdo que me estaba revolcando del dolor de muelas, andaría por ahí de los doce años de edad y en la casa ir a donde el dentista era un lujo al que no podíamos acceder, para tanto no llegaba el salario de mi papá ni la venta de nuestros helados. El dinero no se desperdiciaba en repellos y cuando era de vida o muerte se hacía el esfuerzo para que con un alicate el dentista pusiera fin a nuestro tormento. Y así la mayoría en la colonia. Aquella tarde me doblaba del dolor y no había calmante que me lo…

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Savia.

Qué haré de mi vida Sin ti poesía Quién llenará de amor Mis versos Quién hará florecer Las soleras Y mi alma llanera Suspirar Qué será de mi vida Sin tu brisa de cordillera Cigarra de mi inquietud Viento fuerte Luna llena Virtud Qué haré de mi vida Sin tus alas de mariposa Venus hermosa Numen de mi clamor Amor, qué haré de mi vida Sin las quimeras Sin tu fulgor Sin el sendero Sin el mar bravío Sin el peñascal Sin el faro Sin el páramo Sin la playa de salitre Sin el viento Sin el barco a la…

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Deshoras.

Marca el reloj las deshoras Con sus agujas quebradas Con las nostalgias rasgadas En su vaivén Las deshoras de su inframundo Los estragos taciturnos Los poemas de queroseno Los versos de un querer El sentimiento raudo Las cuitas del ayer Marca las deshoras Con su paso ensombrecido Niño triste, anciano amigo En soledad. Ilka Oliva Corado. Diciembre 02 de 2014. Estados Unidos.

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En flor.

Ella era la niña más triste Ella era la desolación Era el ocaso de noche en silencio Era un murmuro sin voz Ella era una lágrima amarga Una constante autodestrucción Era un vacío impreciso La infernal adicción Ella era una renuncia constante Un delirio sin expresión Era el rencor inconcluso Ella era un trastorno explosivo La mirada de un penar Era el cansancio de su intentar Un pantano, un desierto Ella era el desconcierto Ella era…, hasta que llegaste vos Con tus monosílabos Con tu contundencia Con tu lozanía Con tu expresión Con la lindeza de tu mirada Con tu…

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Una historia de alegoría atemporal.

Se lo he escuchado decir a tantas personas en distintos lugares: “lo único irrecuperable en la vida es el tiempo.” “Nunca el agua de un río pasa dos veces por el mismo lugar.” Entre mi enojo con la vida siempre existió el reclamo de mi infancia trastornada; las pocas horas para dormir, la sobrecarga de trabajo y tener que luchar siempre contra la corriente para lograr salir del agujero. Ser invisible y no ser escuchada por más gritos que pegara. Pasar desapercibida y ser notada solo cuando subía la hielera de helados en mi hombro y los ofrecía con voz…

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Treinta y cinco.

El primer trago de cerveza me lo tomé cuando andaba cerca de los nueve años de edad, de ahí pa´l real se me volvió sangre. Se me volvió costumbre de niña que iba a la tienda a comprar los litros de cerveza cada vez  que sus papás ahogaban su miseria en el alcohol, para olvidarla entre los brindis aunque regresara infernal en la resaca. Y fue tornándose en una adicción de espuma de malta. La tengo en la sangre y forma parte de mis glóbulos rojos, es la espesura de mi hemoglobina. Así empezó mi soltura y afinidad por los…

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Ferguson llora.

Lloran desde los campos de algodón Las espaldas destrozadas de los esclavos Sollozan las manos fecundas de las mujeres negras Que limpiaron los baños en casas de blancos Lloran desde la historia los niños golpeados Por la mirada tirana de la denigración   Lloran, lloran, las tumbas sin nombre Los huesos quebrados, la carne viva La herida incurable de la segregación Murmuran los vientres marchitos La honra abusada de las niñas esclavas del patrón   Lloran los girasoles y los cañaverales Llora la flor de algodón, El silencio testigo de la discriminación Duelen los golpes, la humillación Duele el pasado,…

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