Post frontera. (XI)

País de llegada: la convivencia. Cuarta parte. Me dediqué a anotar en un cuaderno todo lo que mi hermana iba gastando en mi comida, zapatos y vestimenta. Sé lo que cuesta ganarse el dinero y no iba a estar de mantenida aunque ella nunca me cobró, yo comencé a pagarle en módicas cantidades cuando comencé a trabajar. Me decía que era una orgullosa y yo por el contrario le decía que no era orgullo, que se llamaba conciencia. Pero, ¿y lo moral? ¿La ayuda moral con qué se paga? Con nada. Una queda en deuda toda la vida. ¿Con qué…

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Post frontera. (X)

País de llegada: la convivencia. Tercera parte. Cuando ella tenia un año de estar viviendo en Estados Unidos hablamos por teléfono y le dije que me iría de la casa porque era imposible vivir junto a mi mamá, ya lo había hecho una vez, cuando mi hermana aun vivía en Guatemala, me había ido a alquilar un cuarto sola, pero a los meses regresé porque lo hablamos con mi hermana y ella no podía sola son la carga de los hermanos pequeños, las dos éramos las que de alguna forma no permitíamos que se hundiera el barco, regresar fue como…

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Post frontera. (IX)

País de llegada: la convivencia. Segunda parte. Mi hermana mayor y yo crecimos siendo totalmente independientes, con que cumpliéramos con el trabajo, la escuela y el oficio de la casa mi mamá nos dejaba decidir qué hacer con el resto del tiempo libre, muy escaso por cierto. Siempre nos dijo desde niñas que lo único que nos podía dar de herencia y que nadie nos podía quitar era la independencia y la educación. Crecí entonces bajo mi propia ley. Nunca he podido verla como mamá porque crecimos prácticamente juntas, mis padres fueron dos adolescente que se juntaron y parieron, en…

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El origen de mi locura. (III)

No son fumadas, ni guareadas y mucho menos pegamenteadas es la mera realidad, en mi casa mis tías y mi mamá sesionaban tratando de encontrar el origen de mi locura, de metiches iban los esposos –todos zacapanecos- a tratar de ayudar a descifrar decían, pero yo les hallaba que iban más por soloquearse las tortillas recién tostadas a las que les agregaban culantro y tomate que cortaban en mi parcela. Mi Nanoj los mandaba a que a trataran de contarles las niguas a los coches. Sucedía por las tardes; ponían a hervir café de tortilla, de máiz o de los…

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Post frontera. (VIII)

País de llegada: la convivencia. Primera parte. Más allá de las remesas y de las estadísticas y diferentes rubros en que nos colocan quienes hablan de migrantes sin documentos en términos de aporte económico al país de origen, existe la convivencia. El día a día dentro del apartamento o casa en que se intenta formar nuevamente un nido temporal, invariablemente es temporal porque el único que siempre fue y será es el que dejamos en el país de origen así algunos hayan adoptado al país de llegada y de residencia como la última morada. En el país de llegada pasa…

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Post frontera. (VI)

País de llegada: la frustración. Primera parte. Nada en mi vida había sido lo soñado, lo poco que podía imaginar en el lapsus entre el trabajo y el estudio era inalcanzable para una niña vendedora de helados, su destino estaba claro: envejecer en un puesto de mercado viendo la vida pasar como quien avista a finales de abril, las nubes que anuncian los aguaceros de mayo. Como el embeleso de las parvadas de loros a las diez de la mañana. Como quien ve pasar los vagones de un tren sobre una ferrovía lejana. Para mí el máximo logro, la cúspide…

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Post frontera. (V)

País de llegada: la imitación. Como bofetada sentí la imitación de los emigrados fingiendo ser anglosajones. A los días de recién llegada vinieron las fiestas de fin de fin de año, comenzaron con el Día de Acción de Gracias. La mayoría de indocumentados las trabaja y realizan sus reuniones a altas horas de la noche cuando regresan de trabajar, al siguiente día hay que madrugar al trabajo nuevamente. Los feriados no son para nosotros porque no contamos con beneficios laborales y muy pocos empleadores tienen la conciencia como para dar el día y pagarlo, aquí el que no trabaja no…

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