Post frontera. (XIII)
País de llegada: los mil oficios. Segunda parte. Si algo me enseñó mi Nanoj fue a no tenerle miedo al trabajo ni a la adversidad, “porque la vida allá afuera es dura” siempre nos lo ha dicho. “¿Vos creés que yo soy mala? ¡Pues esperáte a salir a la calle a ver cómo te tratan! ¿Vos creés que yo te lastimo? ¡Pues esperá a crecer y me dirás! ¿Vos creés que yo no te quiero? Nadie en el mundo te quiere más que yo, porque te tuve nueve meses en mi estómago y te parí con dolor, fuiste la hija…