A dónde va la alegría de los pueblos marginados.
A dónde va la alegría de los pueblos marginados En dónde juegan los niños si son explotados A dónde van los sueños de las madres primerizas Por qué la lluvia es tan bella cuando se desliza en las cornisas. Por qué las manos forjadoras de los obreros No inspiran respeto más bien reniegos En cualquier galera se acomodan los jornaleros Los olvidados del mundo, los verdaderos. Caminan ensimismadas las niñas trabajadoras Aprenden a decir sí señora ¿Quién, quién las valora? ¿Quién se indigna? Más bien las ignoran. Lustran los zapatos los niños excluidos Les ponen los mocasines…