Arte | Pintura

A finales del invierno, cuando la primavera comienza a dar pequeños suspiros, asomando en la lejanía, entre la niebla y la lluvia, hamaqueándose en los días de hielo negro y nieve algodonada, de la tierra emergen las primeras flores. Pequeños brotes que alegran el alma con la ilusión de los cerezos en flor, el aroma enloquecedor de las lilacs y el canto de las aves. Serán los días de lluvia de chipi chipi y niebla espesa como los dulces de algodón hilándose en las manos de los vendedores en las ferias patronales.

Las flores son blancas, pero pinto a mi manera porque es la única forma en la que puedo hacerlo, con mis colores coloricos, no sería yo si pinto todo con sus colores naturales. Es mi versión de las campanillas de invierno (Snowdroops). Con esta pintura doy comienzo a mi nueva serie llamada Mi pueblo rentado.

Óleo sobre lienzo. 30×40 centímetros.

Si usted va a compartir este texto en otro portal o red social, por favor colocar la fuente de información URL: https://cronicasdeunainquilina.com

Ilka Oliva-Corado.

06 de abril de 2025.

Deja un comentario

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.