Un corte de cabello.

Es muy complicado cuando una persona formula su criterio en base a prejuicios, estereotipos y doble moral y en ese soporte expone su opinión por demás sesgada. Y es mucho más difícil aun cuando esto es cosa de una sociedad completa. En esta ocasión voy a hablar de cómo el convencionalismo ha hecho que muchísimas personas me vean distinto desde que me corté el cabello y se atrevan a decirme las razones por las que me lo corté, según ellos. Y también de cómo la visión es distinta dependiendo la generación y el país.

La primera: te cortaste el cabello como hombre para dejar en claro que sos homosexual. La segunda: te querés sentir hombre. La tercera: querés ser el hombre de la pareja.

No tengo por qué explicar la razones de por qué me corté el cabello, es mi vida privada pero lo haré, desde hace cinco años que quería donar mi cabello a una organización que se dedica a hacer pelucas para niños con cáncer, pero en ese tiempo lo tenía pintado con rayitos y por regla no aceptan cabello teñido, tuve que esperar que me creciera y que el tinte desapareciera, eso sucedió en diciembre de 2012, dos días antes de Navidad me lo corté y fue un día muy feliz en mi vida, porque estaba donando algo mío, muy fácil hubiera resultado donar diez, veinte, cincuenta dólares, pero yo quería dar algo mío, algo que yo amara, y amo mi cabello colocho herencia de mis ancestros garífunas. Lo amo tanto que muy pocas veces me lo sujeté con una cola, siempre lo tuve suelto. Y en 33 años nunca me corté más que las puntas, hasta ese diciembre que me lo corte a la rapa prácticamente porque hay una medida establecida como mínima cuando se dona cabello, entonces si lo donaba tenía que dejármelo muy corto, y lo hice.  No dije por qué me lo corté, cuando me han preguntado he dicho que por ganas. Hasta hoy que estoy escribiendo aquí de este tema. Pero también, si me lo hubiera cortado por las razones que las personas creen, ¿cuál es el problema? 

Eso no me hace mejor ni peor persona, simplemente me corté el cabello y lo doné. Me enteré que para lograr hacer una peluca para personas con cáncer por lo menos necesitan la donación del cabello de diez personas. O sea, con el mío no alcanzaba ni para la quinta parte, cosas que desconocemos porque el cabello es sinónimo de belleza femenina y gracias a que tenemos salud se conserva muy bien. Pero qué pasa cuando el cáncer ataca y las personas toman quimioterapia y el cabello se les cae, también sufren, son juzgadas con prejuicios por quienes desconocen las razones y aunque no las supieran no tienen por qué criticar a los demás. Nos puede suceder a todos.

El cabello vuelve a crecer, el mío crecerá solo que opté por dejarlo corto dos años y disfrutarlo así, nunca me imaginé que sería atacada con tanta opinión mezquina y homofóbica por personas queridas, conocidas y desconocidas.

Este corte de cabello solo ayudó a que otros botaran el barniz, porque yo con o sin cabello largo sigo siendo exactamente la misma persona. ¿En base a qué voy a venir a deducir o a afirmar que una mujer se corta el cabello porque quiere dejar en claro que es homosexual? Puta madre, ¿cuántas mujeres homosexuales existen con cabello largo? Millones. ¿Cuántas mujeres heterosexuales existen que tienen el cabello corto? Millones. Entonces, ¿por qué tiene que ser señal de algo el cabello corto o largo?

Y lo sorprendente es que las sentencias también han llegado   de personas tituladas en la especialidad de psicología, eso solo deja en claro que los prejuicios y la imbecilidad no los quita la educación superior.

Ha cambiado mucho, antes para cierto tipo de personas mi belleza era mi cabello largo, no había día que no me lo chulearan, a donde iba la gente tocaba mi cabello y me decía algún cumplido. Hoy en día inclusive gente desconocida cuando ve una fotografía mía con el cabello largo prácticamente me ordenan que me lo deje crecer porque así me veo más femenina y bonita. ¿Qué se creen para opinar respecto a la vida de otros?

Y eso sucede generalmente con personas latinoamericanas, mayores de cuarenta años, que son las que juzgan con los tres golpes de pecho y la vieja escuela pero también con personas de mi edad que yo conocí en Guatemala.

Algo totalmente distinto sucede con personas europeas, asiáticas, africanas y estadounidenses, es más les encanta mi corte de cabello. Que es solamente eso, un corte de cabello. Y no me lo sigo cortando por rebeldía o para estar en contra de lo que la gente quiere que haga, eso es desgastante, es demostrarles que lo que dicen tiene importancia en nuestra vida, sigo cortándome el cabello porque me encanta no tener que peinarme durante horas.

Cuando me dicen que me empeño en que el mundo me rechace yo pienso que simplemente soy y es el mundo el que no soporta que las personas sean. Esta sociedad mezquina no soporta que una persona tenga la libertad de vivir. Mi cabello crecerá cuando yo decida dejarlo crecer, mis sentimientos son los mismos, sigo siendo la misma Ilka. Y las mujeres me van a seguir encantando como me han fascinado toda mi vida. Y de igual forma me van a seguir trastornando los hombres de pelo cano, barba espesa, pelo en pecho, altos y atléticos. ¿Tiene un corte de cabello algo que ver?

Este corte de cabello ha sido una escuela para mí, he aprendido a ver lo que antes no era visible a mi inocencia de adolescente silvestre y de periferia, las personas pueden hacer mucho daño si se los permitimos, no hay que dejar que invadan nuestra vida y que se encarguen a robarnos nuestro albedrío. Sigamos siendo, atrevámonos a ser diferentes y vivir apasionadamente, defendamos nuestro derecho a la locura, así el mundo entero se pare de cabeza.

Por mi parte es punto y final el de mi cabello corto, pero creí necesario expresarme al respecto por eso este escrito. Y cuando crezca y alcance la medida necesaria para donarlo por supuesto que lo volveré a hacer. Es algo mínimo realmente, comparado con las necesidades de otros.

 

Ilka Oliva Corado.

Agosto 25 de 2014.

Estados Unidos.

5 comentarios

  1. Nunca te compares con nadie, pues la perfección absoluta de cada ser radica únicamente en su comparación con sigo mismo.

  2. Pues sí, el dicho «si yo te quise, fue por el pelo; así pelona, pa’ qué te quiero»… era solo un verso de los tiempos de antaño, cuando la «femineidad» venía envasada en el cabello largo y las faldas. ¡A cuántas nos criticaron por usar solo pantalones! ¡a cuántas nos dijeron marimachas! Yo usé el cabello corto durante varios años por la pura comodidad de no tener que madrugar más para podérmelo lavar y andármelo cuidando y echando cosas para mantenerlo sedoso… sobre todo cuando me tocaba trabajar en comunidades donde el agua no era de tan fácil acceso… ahora me he dejado crecer de nuevo el cabello y lo disfruto así…
    Lo importante es eso: que una se guste y se lo disfrute… lo demás (y los demás) es lo de menos.
    Sin embargo, querida Ilka, me encantaría ver una foto tuya con el cabello largo… no logro imaginar esa melena!

  3. Bien dicho, querida Ilka

  4. Un abrazo Ilka, no vi una foto tuya con pelo largo; pero igual, sos bella y eso iradias, pero tenes una particularidad muy tuya y lamentablemente no común entre nosotros, hombres y mujeres…..BRILLAS CON LUZ PROPIA y has aprendido a cuestionar, a buscar la razón de las cosas y no a repetir y aceptarlas, solo porque los demás asi lo dicen. GRACIAS POR SER ASI.

Deja un comentario

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.