Puta vos y él coyón.

Aun no comprendo por qué razón mi artículo llamado Por Puta, causó tanto alboroto, ¿sería por la palabra? No le encuentro nada de transgresor. ¿Qué significa para usted la palabra puta? De ahí depende la cosmovisión de su mundo y la interpretación que le de a esas cuatro letras. Lo que a usted le enseñaron desde niña y niño acerca del significado y depende mucho si usted ha seguido a lo largo de su vida, ordeñando y señalando como denigrante esa palabra. Yo soy puta, ¿usted lo es? ¿Es usted puto? Y no me refiero a que si es homosexual, porque esa es otra expresión burda que utiliza para denigrar al hombre con diferente identidad.
El sistema patriarcal es quien manosea el contexto y las mujeres lo solapamos. Aclaro que las mujeres que se creen pulcras y castas, de moral devota. Esas ninfas de cuna limpia y cuidan con su vida el qué dirán.
¿Por qué se llega a los extremos? ¿Por qué no enseñar a nuestros hijos varones a respetar? Digo hijos porque los niños, niñas, jóvenes y jóvenas son nuestros hijos aunque no los hayamos parido, es nuestra responsabilidad como humanidad, ayudar a que tengan una formación integral en todos los contextos. No involucrarse porque no llevan nuestra sangre es traición a la vida misma.
Pienso en los extremos porque son acciones que inician como mínimas como por ejemplo un piropo en la calle que deja de serlo cuando se grita ofensa, se convierten en violaciones, en opresión y en feminicidios. Porque se nos enseña a las mujeres a obedecer y a solapar y a ellos a ejercer poder y a violar. Viola el adolescente, el adulto en la calle y viola el esposo a su compañera en el hogar. Situaciones entrelazadas con herencias milenarias de abuso y silencio. Son permitidas porque las mujeres somos putas y somos objeto de placer, así lo dicta el patriarcado y así nosotras lo avalamos, criando a nuestros hijos bajo la misma premisa.
Enseñamos a nuestras niñas a que se den a respetar para no provocar a los hombres a que las puedan violar. ¿Pero qué es darse a respetar? ¿Qué es respeto para el patriarcado y para el feminismo? ¿Para un hombre y una mujer? ¿Qué es probación?
Darse a respetar es no hablar “malas palabras” como por ejemplo la palabra puta. Vestirse decentemente, ¿qué es la decencia? ¿Qué es vestirse decentemente? En lugar de enseñar a que son libres desde la infancia y que pueden vestirse como gusten y en lugar de enseñar a nuestros hijos a que las niñas, adolescentes y mujeres podemos vestirnos como queramos que esto no tiene que ser motivo para que ellos decidan violarnos y después decir que fue porque nosotras los provocamos y el sistema de justicia solape tal confesión y culpe a la violada y deje libre al violador.
Mis planteamientos no son los de una feminista versada en la lectura de tomos y tomos de libros, no tengo un solo diploma en estudios de género, estoy contando y exponiendo desde mi propia cosmovisión que está tierna aun.
Puta es la que tiene las tetas grandes y en lugar de taparlas y esconderlas –como lo hacen las mujeres solapadas y que mueren por un escote- se viste con blusas de telas ligeras que dejen ver la punta del pezón que sobre sale debajo de la tela.
Puta es la que usa minifalda cuando va a trabajar y provoca las miradas lascivas de sus compañeros y la envidia de sus compañeras. Ya quisieran muchas tener esa libertad y la cosa es que la tenemos pero no hacemos uso de ella porque tenemos miedo aun a atrevernos a ser y a vivir. Desconocemos la autoestima. Una mujer no tiene que tener una medida de maniquí o de modelo de pasarela para vestirse como guste y sentirse sensual, atractiva, todo esto tiene que ver solo con el amor propio y la fuerza interior, tenemos que dejar de ver hacia fuera y ver introspectivamente, ahí adentro hay tanto por descubrir y amar.
Dejar de ser manipuladas, oprimidas por el patriarcado en nuestro propio ser que solo es nuestro de nadie más. Si dejamos que todo esto nos hiele la sangre seguiremos siendo objeto en todas las maneras habidas y por haber de la expresión y de la conducción entre ambos géneros. Ellos dicen que son putas las que enseñan las piernas en minifalda pues demostrémosle que somos putas todas, vistiéndonos como gustemos, pensando y exponiendo, amándonos a nosotras mismas, dándonos la mano en lugar de meternos cuchillos por los costados, no solapemos, liberemos.
Y enseñemos a nuestros hijos, amigos, compañeros de vida, de trabajo a que tienen que aprender a respetarnos.
Puta es la que vive su sexualidad a como le plazca y hace de su libre albedrío un jardín de buganvilias. Que otras desde el árido descampado de la solapación, doble moral y del qué dirán, solo ven florear.
Puta es la que practica sexo anal, la mujer casta solo abre las piernas para que la monte el marido que después se baja complacido sin importarle siquiera qué siente, qué piensa y la carencia de su compañera en ese monólogo de encuentro sexual. ¿Plenitud? De ninguna manera, pero son las que cuentan que su vida sexual es un deleite y que tienen en sus casas un toro de lidia que la deja complacidas y rebosantes. Ajá.
La mujer puta es la que se ríe a carcajadas, la casta hasta eso sabe fingir y encarcela su felicidad instantánea. Hasta eso nos han robado, los instantes de alegría extrema que, barnizamos para no parecer una mujer de la vida. ¡Enloquezco por las mujeres de la vida!
Puta es la mujer inteligente, la que no se queda callada, la que denuncia, aparte de ser re sentida también es puta, ¡qué honor! ¡Qué honor de unas cuantas!
Puta es la que tiene amigos hombres.
Puta es la que promone en la mesa, en el trabajo y en la cama. Es decir la que se atreve a pensar, a crear y a explorar. Puta es la que se masturba, todas nos masturbamos, pero quien lo acepta es una mínima cantidad. Es mejor fingir no saber de los infiernos del goce carnal con nuestras propias manos sobre nuestro cuerpo, para eso está el hombre que es siempre el que desflora, el que enseña, el gran maestro, el que dirige, el que amo y señor se jacta de ser el gran domador de la bestia. Ajá.
Liberados los que en su camino se han topado con el clítoris y éste les sonrió porque con esto los invitó al verdadero festín de la sexualidad, pero hay cada bruto que no más lo mira y sale corriendo, ¡coyón!
Puta es la mujer independiente que no se deja doblegar ni por el qué dirán ni por el compañero sentimental. Las solapadas quisieran ser putas pero les pesa más la comodidad de tiempo, dinero, clase, moral y el qué dirán. El día que se liberan malaya una revolución femenina que haga tragar fuego a cada hombre abusador, el día que despierten y seamos una rebelión haremos del patriarcado cenizas que el viento de equidad desaparecerá.
Hay tantos contextos para lo de la palabra puta que un artículo de una principiando no basta, las grandes feministas llevan años desglosándolo.
Puto. Puto no es el hombre homosexual, él tiene diferente identidad sexual que es muy distinto a ser puto. ¿Sabe usted que la mayoría de trabajadores sexuales no son penetrados sino que un hombre macho y fornido les paga por que los penetre?
Así va la doble moral de la gente, de los solapadores, de los machos cabríos que solo son apariencia y porte y garbo y labias y a la mera hora compran su vaselina y calladita la boca se vuelven seres indefensos abiertos en cuatro patas a las fauces del alegre pene que los montará. Pero claro si alguien los descubre dirán que pagaron sus servicios para montar a un puto y salir de la duda. ¿Quién es el coyón?
De coyones está llena la vida, el sistema, los patrones de crianza, la sociedad, la moral, el qué dirán. De solapadas está llena la entraña.
¿Entonces quién es puta? ¿Usted, yo? ¿La fulana, la mengana? ¿Quién es puto y quién es coyón? Empezando por re establecer el significado de terminologías. Empezando por no decir a nuestros niños que la niña que se sienta de piernas abiertas le quiere enseñar el calzón y es puta. Empezando por no decirle a nuestras niñas que deben sentarse con piernas juntas porque las que se sientan con las piernas abiertas son putas. Dos mínimos ejemplos. Las niñas se pueden sentar como gusten y los niños las deben respetar.
Alguna vez escuchó ésta expresión: puta vos y él coyón porque no te pone en tu lugar. Puta es la fulana y el mengano tan coyón por eso ella se le monta encima. De cascos ligeros salió la mujercita y él coyón que no le pone rienda. ¿Qué le dicen estos enunciados? Patriarcado en cada letra. ¿Qué significado tiene para usted la palabra coyón?
Ahí seguimos filosofando en otro viaje pué. Usted no solo lea lo que yo escribo si tienen algún aporte bienvenido sea, eso sí que no me venga con ínfulas de letrado y letrada porque mire, ahí tengo cal en una bolsa. Creo que aprenderíamos de todos y de todas sin algún día dejamos el ego de un diploma en el caño del inodoro y aportamos con la humildad de la experiencia y de la formación de la educación superior que su único fin es emancipar mente y corazones. ¿Entendió o se lo explico con plasticina?
Ilka Oliva Corado.
Febrero 05 de 2014.
En mi tabuco.

Deja un comentario

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.